traición de la musa al dragón...

¿se ha integrado la propuesta poética?, 

¿en los desiertos que marginan ideas y contenidos?

si ahora ya no hay humanismo que alcance, como estructura de la oración lumbar que se inclina en lo amigable, lo seductor de un consenso instrumental...

de un juego bombastico y epistolar, demasiado siniestro en los cinismos que alienta, siempre tan dulces y honrados, de algo sensible, empatico, manierista y tan complaciente al bienestar...

¿es entonces la poesía, un trampolín cultural?, ¿sera un recuento de votos?, ¿de amigos y abrazos afables?, ¿de listas negras, y de sonrisas coherentes?...

¿esta es ahora, la segura eternidad del prestigio de lo que aliena en su amor maldito?, ¿y en todas las esperanzas de un bello atardecer?, ¿andar buscando entre intereses las letras?, ¿siempre asumiendo bondades como espejos rotos de un ejemplo?, ¿del chófer que la lleva al sitio amante?, ¿de las recomendaciones varias?; ¿desviaciones hacia mensajes reconfortantes?, ¿y estables?...

si abrigó el poder, se ha reconocido en el fango gris dejando al margen la imagen, de todo cuanto no se entiende y por no aburrirse, se ha hecho un habito muy competente, repitiendo el culto social, sostenido en la figura de un modesto caudillo de "amor" supremo, de un director "glaseado" en oro puro, de una piel mística...

el discurso en lo que se reproduce y conoce como algo mas noble, se afirma en lo superior ¿y es ese?; ¿justamente el sentido del paradigma que explicaría?, ¿todo lo que seria un santo, un bandido, un poeta o un profeta?...

pero así nada queda y es, realmente libre aquí en la tierra, ni en la tal tristeza resuelta, o en el premio que abraza el primer orden que impera y define, lo que es perdida, victoria y triunfo...

¿sera que así, solo se aferra a enunciados de otros cometas?; demasiadas preguntas y el silencio se nos acerca; de lo que imita en todas las colas del cielo que desaparecen dejando estelas y aquellos, escándalos de ojos mascotas, domesticados que les siguen, buscando mimesis del pulso en la danza de la originalidad escatológica, de una explicación edulcorada, demasiado anestésica e indulgente, patriarcal en sus pliegues oscuros de irreverencia y rebeldía aparentes...

se embriaga en la frecuencia ajena que escucha y luego desecha, una vez que insiste, existe y es reconocida como el deseo en contexto de aquella otra costumbre y conducta adquirida, identificada como el gusto, el molde de algo hermoso, admirable, de algo "bueno", conveniente...

la que al fondo actúa en la pieza oscura de su conciencia, viene detrás del cóctel y en la mirada subyugante que arranca las ropas, la homogeneidad sensible pues ya, es todo tan visto como igualdad del mensaje triunfalista y predilecto, absoluto y amenazante en lo imposible, de superarse al trascender todo el limite del prestigio, y en la bendición dependiente de un guru exótico, erótico...

ser así; es como actuar de un poder creativo en la boca del asno ansioso, del que siempre tiene sed de un reflejo en el lago (in)quieto y se (ad)mira allí, del que tiene hambre de su propio sexo; recurso del que se aleja en su carne amarga en la espuma blanca de la virtud y el evento sensacionalista...

ya que es la superficie en si mismo de entrega, se mueve al ritmo escrito en la frase del bronce, de adoración de abuso infantil perturbado y entre sus piernas, que tiemblan del frío misterio...

luego alcanza el genio maligno y modesto que lo arropaba en la noche, quien va clavando los dedos críticos del castigo y el consejo, en su espalda culpable, palabra ingrata, detestable, soez, la que siempre se ha quejado por su orgullo y exceso de confianza...

vanidad, esta es la condena de un éxito, del cansancio que aburre, de anorexia en despilfarro, de tanta atención y energía perdida y de un porvenir, promesa violenta, embarazo pero no engendra nada mas que un tiempo muerto y un "corpus" de espacio, podrido y paranoico...

pues solo se aferra a lo que ya esta añejo, y se enquista en lo que es visto como lo mas seguro, en el orden monástico y estético de todo estilo comprobado, de toda maravilla y prodigio legal; cuando trasluce una irreverencia ridícula  que ya estaba integrada en lo que se hizo aceptable, tolerable, deseable; lo que ha derivado en preferencia oficial de aquella casta y moda que se impone, como un gusto en el martirio o el sentido en el gozo y así, se observa como lo perfecto...

pero que indiferencia, se engendrara en la semilla de un solo flujo que nos juraba lealtad eterna; siempre y cuando se ordene el entierro estratégico que deviene en ley, de orden y respuesta... 

ya que así se niega, se logra y obliga al leerlo todo este sistema, del hecho al derecho de elevarse el ombligo al olimpo; siendo estimulo el símbolo que te hace alguien mas culto y potente, mas bello e interesante; así el libre comercio ontológico como para comprar muchos amigos, varios cuerpos y amantes, las entradas del alma y anima al mismísimo circo de infiernos y aire acondicionado, y hacia el "vip zone" del tinglado en el paraíso; pero que interesante predica y política discurre en las faldas de las divas y en los pantalones de los favoritos, allí en sus fiestas etilicas y ascéticas...

solo en los mecanismos del desprecio y aprecio existen, como recados quedan la oferta del hada o el profeta enfrentado al verdugo y la bruja, y así aparece el cordero en la savia expiatoria de la masa, es la sangre que asume y acumula hacerse un barro y objeto, de un sacrificio perfecto, de algo completamente legal, competente, divino, apolíneo de aquella moral de vanguardia; lo otro se retuerce en la rabia de la creación mas libre, la insistencia que porfía en el eje absceso del lugar común del cliché, del ídolo que ya fue historia, siempre sera un recuerdo destinado a morir y es, nuestra inclinación tradicional de rodillas, ante el ejemplo de asombro, la que hace condena y hastio, de todos estos alejandros y alejandras, fridas, marios luisas y albertos, de todos nuestros julios, gabrielas y euripides...

cuando todos ya están consagrados, se perpetúan como en roca y se despiertan como fantasmas, que rondan los sueños y armarios, anhelas que son las turbas que aprenden de lo que no entienden que ocurre, aquí o allá, de afuera o adentro no saben, que buscan debajo de sus camas algo ajeno a su voluntad que infiere y ejecuta; luego viven hipnotizados y se abrazan, lloran, masturban, alaban y encienden las velas e inciensos...

así prosiguen el rezo, el cántico  el mantra y la emoción, cruzan los dedos así como las piernas y esperan, la respuesta al maya develado, y el resultado de sus apuestas, (vi)viendo en las pantallas el resultado del quino acumulado, después se molestan, se agitan, se enojan, se sonrojan y excitan, se avergüenzan, se consumen y aplauden después, siempre después... 

se alejan, reniegan y olvidan constantemente de lo que "era", tan importante e imprescindible en sus vidas;

de lo que no seria nunca mas bien, y así se esconden, suspenden...

desaparecen