lo que sabemos de la pregunta...
ya no se cuanto tiempo a pasado, ya no se, deslavado el sentido y arrebatado en el calor, desmedido y austero, ya no se cuando camino o vuelo, ya no se, desentendido en el olvido del olvido, ya no se cuanta agua bajo el puente a pasado y ya no se, si hidratado o herido...
ya no se cuanto es lo comprendido, lo ganado y lo perdido ya no se, el momento de parar y seguir, tendido en el silicio y haciendo huellas en las calles, mas deseo que sublimo, la profunda miseria, el escrito incomprendido, la vulgar justicia, lo eterno, lo materno o paterno, lo furtivo, ¿y que decir cuando ya no queda ego?, solo sentido, removido, escondidos, desligado o ya no se, de cuando el cuando es martirio y a veces sonrisa libera, voy gozando la satisfacción de estar vivo, pero haciendo sentido, recuperando lo extraviado, lo que siempre nos han quitado, y saber que tengo todo lo que se termina, que de aquí empiezo de nuevo, que ya estoy listo...
de ella, del artífice de ella, la siempre media luna que amaina, me calma y sosiega, me hago intermedio, escribo, cuando ya no se que es lo que veo o me ve, desafío los limites, transformando la indiferencia, sufriendo en lo cercano al morir, pero capaz de volver a existir, ir taladrando en medio de lo que va desgastandolo todo, suscitar la respuesta, porque tanto se que ahora ya no se, y no me obligo cuando no es mio, no estoy perdido, puedo creer cuando cada uno se instruye en cariño, puedo avanzar atrevido ahora que va conservándolo todo el correo creativo, la nada de tu espera y pienso, ¿porque no fue cierto?, el engaño es mas fácil, uno sabe muy bien lo que siente, la ilusión de lo cierto y que es presente, la tensión emancipadora de lo cierto, la fuerza del sentimiento, eterno, se evidencia y arma como un tiro de caricias que están muy cerca...
también cuando remueves la tumba fresca de un mundo recién nacido, pero yo se que ya se de las palabras que van quemando el misterio, abriéndole paso al futuro que es renacimiento, el florecer sin miedo, y aun mas se que siempre se puede, cuando si solo si, siempre se quiere, se anhela...
constantemente escuchando el piano ahora y la veo en mis sueños, despertando voy cayendo, o a veces sonriendo y la creo allí, cuando me enciendo en el fuego, como destino que no es dueño, en compañía de una pureza que no es de los cielos, tampoco se nombra en la tierra, ni cuando no hay mas ideas, y los ejes o aleteos la anuncian de nuevo...
entonces vienes enarbolada en una infinita belleza que me arroba y destierra del hielo...
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