Recuerda que son las voces...


"A veces lo innombrable que brilla en las tinieblas me habla y recuerda que mejor me quede callado observando, que goce al ver cómo es que este teatro animado de humanos se retuerce y conforma en base a ideas supuestas; ello me dice cómo es que los de esta raza antropocéntrica actúan de cobayas en manos de entidades extrañas, ajenas a su propio encanto; luego me indica que a ellos y ellas les gusta mucho el placer de hacer gremio y vivir con las murmuraciones de masas, y así me indica también, por más que hablemos y avancemos hacia una aparente unidad social, que solo lo intentamos en la clásica operación racional de una dirección política enajenada"

"Luego aparece "ella" y me dice que lo hacemos simplemente como algo inútil, eso de tratar de entendernos todos, ya que siempre se impone a la fuerza, la misma fuerza que domina desde siempre, solo que con nuevos disfraces de identidades, complicidades y esquemas persuasivos diversos, pero hay zonas, de las que muy pocos se van por otros "lugares" donde no hay direcciones, y es que esto no es para las masas, no es para todos porque allí es bastante peligroso e indiferente a una moral constituida, y entonces me dicen que solo quedara en refulgencia de un pasado remoto y glorioso, la mente del que añora o espera algo más del devenir de un mañana, y es que ya estamos condenados por creer que existe un futuro, y a todos se les olvida entonces, que es lo que somos nosotros en el mismísimo acto del "tiempo", que no es el tiempo lo que ya es primero y nos transforma, pues nosotros somos el tiempo como influencia"

"Ocurre que nos perdemos de lo eterno e inmediato por andar de idealistas o adictos sensuales, y otros espantos lógicos demasiado evidentes y filosóficos nos derrumban la claridad sin luz, ya que no es negar carne o espíritu como el estado de percepción maestra, y entonces me dice también; que hay que mantener la agresividad pura de animal tan sabio como salvaje en estas vidas, ya que aquella misma fuerza no es la bruta y ridícula violencia humana, siempre instrumental a lo racional, ya que eso no tiene nada que ver con la energía libre y tremenda de lo que ha creado el mismo autor cultural del supuesto "creador" supremo; siendo algo que luego ha erigido él mismo como un dios para sí mismo y así ser con gusto devorados, humillados en su propio engaño de tanto ensueño y distancias plagadas"

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