"Sigmas del cuerno que penetra en su espíritu"...

Conocí una mujer tan bella, que la propia hermosura se le hizo una carga, una cárcel condena, horrenda en su imagen velada de un mundo sobre expuesto hacia el y ella; que indica, proyecta y le ordena, luego al ser devorada y trastornada en los mil ojos que observan y en las manos tendidas, de múltiples lenguas que anhelan su rostro y consumo; ya que de ambos lados, deseante y deseado, se fueron dando a la idea bajo una tela de araña en el sentido hecho miseria, en la ambición de alienar contacto en las formas tan perfectas... 

Mas nunca fue una diosa en sus templos, solo era una cosa en las piernas, formato en tensión del alma y ansia que inclina el relato al deseo, hecho algo siempre ajeno y por tanto, distante, intangible, imposible y decepcionante...

Se hizo caer a una ilusión en la forma de alcanzar la obra del triunfo en camino a las superficies, bajo el sistema de ocio y contrato en la estructura de-mente masa y polilla, y en la distracción social disfrazada de gozo o amor eterno; pero que ya era adorada en sus lineas y albores, cuando corría en la mente de ambos lados, engaño de instancia y argumentos, debido al sometimiento al convencimiento de hacerse un premio y un medio de alcance y fortuna...

Vive bajo el juego emocional de la propia invisibilidad y angustia espiritual, poblada en seducción de aquellos que anhelaban como el grado máximo de alcanzar potencia y reconocimiento, la fama, el prestigio y la admiración cultural por ella...

Mas no era ella el centro de anhelo puro, o ella ni el, por el y ella, tan solo un intercambio, un arrebato al reflejo olvidado en la divinidad perdida de su honra mutua en sonrisas fingidas y estrategias traidoras e infantiles; por eso sufren, se inquieta teniendo todo, logran nada y desconfían, gritan en la paradoja de una gloria de alabanzas como ecos de histeria, que aturden, disgregan, violentan, vacían...

La desesperación del postergarse al destino en decepción de un contacto enajenado, y en la realidad teatral de hacerse un precio creado, como valor agregado de representación social; cuando se harto frente al poder rápido, controlando un vinculo que se le hizo un vicio y cansancio extremo, se hundió en la exigencia cómoda e implacable, pues ya en la ilusión de unión que solo era un pálido reflejo de amor, caricias o alegrías profundas, sus labios se endurecieron como el corazón, haciéndose a si misma un juguete y contrato de arriendo en (per)tenencia...

Sabían que pretendían de otras formas de apariencia, como el triunfo máximo de estatus, para humanos que busca y porfían en la ingrata insuficiencia eterna, de su propia falta de honor y amor, de energía en la otra mirada, y así en vampirismo narciso desgastaron su mente, degradaron su espíritu y enfermaron sus cuerpos...

No hay búsqueda o pugna del poder en la conexión real de un macho y hembra pleno, solo unión de inteligencia y justicia integral !!!

Claramente si no es así, viven ambos buscando el ser vistos siempre en ellos y ellas, mas bien, mediante un ojo externo y extraviado en la propaganda de una fuerza tirana a un mundo dividido en categorías perversas; lugar de obligación que aprendieron a reconocer como norma y verdad intocable, de una ley pretendida en la tranza burda de inmanencia; solo un gesto al gusto moral, sustituto ético y estético del sentir como valor agregado en la propia vanidad, propuesta relación de existencia vana e hipócrita, triste, perdida, entregada como la misma ansiedad y compulsión del que anhela "tenerla" y la misma que exige, pago y regalías por su atención, por sus besos y abrazos, servicio y atención, mas que un montón en dinero cobrando igual, algo siempre por su apreciada presencia y compañía...

Se ha hecho una mascara y luego aburrida y desconfiada, se aprovecha de olvido y permanencia, pues también ella perdió en ello el sentido y coherencia de unión sagrada y nobleza, se hizo de un cuerpo y honra, la renuncia o explotación fragmentada, pretendiendo estar bajo una sonrisa gélida, en todo lo que se anclara al vibrar de un desprecio y odio intenso, viendo la facilidad de su presa, como el castigo infinito en lo total le constituyo en la idea del si misma...

Asumida como arma de uso y abuso, bajo extrañeza en venganza al poblado que tanto le amasa y ansia, como alimento y ganancia, y en ese entonces; ya fuera donde encontrara algún acto de bondad o crueldad, de lo que fuera cercano, ella le obligaba a tributarle y castraba lealtad y esperanza, cuando lo engullía y criaba haciéndole creer, que también se hacia acorde a una forma dinámica de instrumentos, no personas; del ser solo herramientas, como un medio en la propia intención frente al signo y síntoma de esclavitud dorada y alabada... 

La idea refleja de ser lo que el otro admira, y obligarse mutuamente a entonar funestas melodías, de exageración o anorexia, tan solo para arrancarse la piel de una mascara pegada al hueso, de un rostro lívido y truncado en el hambre de un brillante espejismo...

Fue confundida en el padre que no percibe lo que es ser hombre, y en la madre que le entregaba dominio por la identidad original en la ignorancia de una trágica dependencia en consecuencia y conveniencia...

Ambos; pensando que ganarían tanto así encontrándose, viven pobres de espíritu y materia en la mecánica de una tormentosa indulgencia hacia ellos mismos, llevando a cabo un destino triste y mas que seco en banalidad, decadencia e indiferencia...

Sonrientes, perfectos, distantes, pero nunca amables, satisfechos o alegres...