¿Por qué no tiras del cable y desconectas la máquina del tiempo un momento?; Tu cabeza no es la mente, la mente es tan sólo un pequeño umbral que proyecta el cielo y la carne en los infiernos del ser que todavía no entiende, busca escapar de lo desconocido, y así se aleja de su propia fuente...
La oscuridad sólo asusta al que quiere vivir una sola vida, asusta al que todavía espera en la ilusión sensual que alguien lo tiente y se absorba en ello para ser algo que valga la pena llamar como ente en la gente; nada de eso es la potencia viril del valiente, del supremo eterno aliento magnífico y consciente...
Aquí el poder del mundo no es nada para nosotros, los Magos del fondo obscuro, profundo y cósmico; nosotros movemos los hilos, nuestras garras y alas son membranas titánicas de inicio y cierre en todas las puertas...
Estamos aquí para guardar los pasos, los ríos, las encrucijadas y los puentes; nadie cruza el Umbral sin la venia de aceptación de la inteligencia en nuestra orden, nadie puede llegar a la Madre absoluta sin la bendición del Dragón verde...
Nosotros somos la raza que enseñó a formar y organizar pirámides, los templos que giran, y la ciencia de la música Esfinge; les entregamos visión suprema del arte que nutre a la Gran Serpiente que sana, que yergue y se envuelve...
Somos la médula que al fuego interno enciende...
"Nag Ai Apaec"
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