Sobre la observacion de los "seis enemigos", (arishadvarga) -
El Amor verdadero trae Sabiduría, una fuerza que no es solo técnica y teoría, un tejido de lo invisible en la providencial voz que se mueve contigo, por todos los hilos dorados de nuestros encuentros y las relaciones más honestas, espontáneas; sinceras...
Pero esta maravilla, no puede ser realizada cuando nos aferramos a los placeres y los sufrimientos extraños, porque en lo extraño es que nos alejamos de nuestras verdaderas necesidades, formando engaños y confusiones; confusiones que degeneran un desequilibrio entre lo mental del sentimiento y la lógica de las acciones...
Si el engaño persiste como idea fija en nuestra mente, surge la codicia desde un falso "orgullo", sostenido debido a una falsa imagen del valor que nos entregamos a nosotros mismos como seres humanos, como la entidad particular de nuestra propia visión de individuo...
Esta codicia nace a su vez, de una envidia horrenda y pútrida al sentir que otros poseen lo que nosotros queremos, lo que pensamos que "nos merecemos"; pero está codicia, que agitada en la envidia, es solo un escape de nuestro propio trabajo interno...
Luego de esta codicia aparece la rabia enajenada, reacción baja y mediocre al sobrellevar la tremenda frustración que sentimos, algo que insoportable se disfraza de "grandeza" personal artificial y forzada...
Queremos tal como idiotas encerrados en un ego desorbitado, todo lo que "es mío", y así es como el deseo natural se pervierte en compulsiones y más viciosos escapes, todo esto por nuestros profundos temores que se desenvuelven en el maquillaje de un "gozo" siempre insatisfactorio, porque estas cosas y ansiedades, son sólo indecentes deseos y aversiones muy desequilibradas, entonces nos volcamos al mundo externo y a los demás; los otros se hace nuestros dueños, siempre los otros...
¿Y por qué no yo?, grita el vaho de la frustración convertida en ácido flojo, frustración que se degenera en ira que te denigra y desintegra, que destruye a todos los que; tanto te quieren como te desprecian, y te vuelves un esclavo disfrazado de "orgullo", pero eso no es el Orgullo sano y justo de un reconocimiento inteligente, ni es valor de un Guerrero; es simplemente una vileza inmunda y una decadencia, una debilidad de carácter muy triste y pervertida...
Entonces la gran Muerte te absorbe y trastorna todas las noches, todos los días, caminando siempre contigo, pero ya no es tu amiga, no es tu guía...
Aprende a servir(te) de una verdadera Maestría de vida, aprende a ser verdadero guía y Maestro de los umbrales...
"Naga Zero"
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