De los Rayos Magnéticos...

En la eternidad se encuentran los Atlantes, y en la identidad se reconocen como un silencio que retumba en las raíces; no creíamos saber lo que mejor sabemos, no dudábamos de lo que nos parece completo, y siempre así, emergen las palabras y los encuentros se hacen del valor presente...

Vivir siempre en la concordancia de la naturaleza, y en la comprensión de lo que se ha vuelto imposible y caótico… 

Somos los camaradas que han caído del cielo y se levantaron de todas las sombras, de lunas sufridas y días gloriosos, de manifestaciones y espejos, y hemos sabido bien "ver", nuestros hilos de la incandescencia; fulgurando en la proporción justa, con la fluidez de un conocimiento que se hace una sabiduría del tiempo... 

Y en la simple y cotidiana aceptación, hemos podido encontrar maravillas titánicas y sorprendentes presencias, que ahí es donde somos y nos encontramos, si forjamos por cenizas grises al equivalente fénix despierto que se desplaza y remueve al cosmos...

Su aleteo fulminante va rasgando el momento y haciendo ondas de cielo y corrientes marítimas, ondulaciones territoriales, como un vuelo que muere y nace sin su arriba ni abajo, como un giro que desborda y conforma… 

Este nuevo humano es la potencia de la deriva y la unión que no atrapa, que no obliga, pero que se celebra y trabaja de un gozo limpio a toda fronda psíquica y psicológica... 

Camaradas somos de las nuevas fuerzas del fruto y las flores, con las nutridas y aguerridas raíces eternas, troncos que se entienden de la milenaria cruza de lo que es persistente y se ha atrevido, a transformar con claridad lo común con sutileza...

Labor por lo que anteriormente era tan solo una brutalidad sin conciencia, que ahora es magnífica y madura, ecuánime inteligencia; somos los camaradas y amigos, los dioses caídos y hechos de hueso y sangre, los que en la guerra y la paz se encuentran y afirman siempre...

Nosotros Somos Rayos...

!!!