Declaración de actos, en la autoridad del Giro –


(D.O.G) – Yo soy la Serpiente del fuego y el agua unidos – 

En general pensamos que "sabemos" las cosas, pero no es más que una estrategia de inducción mental, un juego de nuestra capacidad para integrar los datos, tal como entenderlo bajo el marco lógico de un "todo expuesto", y en lo que se declara de la existencia, cuando seguimos buscando resultados para ensueños derivados de suposiciones que no son más que ansiedades del gozo; de la tranquilidad, seguridad y coherencia ejercida, como el poder del control sobre y en nuestras vidas... 

Vivimos creyendo así, que entendimos "todo lo que ya es", "lo que fue", y cuando en realidad descubrimos que las formas cambian constantemente, lo hacemos como una sospecha sin variar mucho en lo absoluto del resultado esperado; cuadramos todo a un fundamento que le da sentido... 

Pero que terrible es la certera, cuando la observamos como lo que nos permite estar contentos y tranquilos, ya que no hay manera de escapar a este abismo intenso de infinito seguido; porque solo somos como la luz de una bicicleta, que en la noche cerrada y sin luna avanza, viajando en los caminos iluminados por una linterna en la vida, y lo hacemos comprendiendo en "tramos" este camino, por algo de lo que siempre falta de ver, porque esto es lo que nos demuestra el umbral y el límite de la realidad que somos, y abordamos como el conocimiento de ir creyendo que lo entendimos todo; pero este es solo un "momento" del viaje en los caminos... 

Qué triste y banal manera de sentir la plenitud y el contento eterno, pero "aquí" es donde se entiende, a pesar del límite; que no hay mucho más para rellenar nuestras vidas como un conjunto en consistencia siempre requerida, ¿para qué?; pues para conseguir un simple gozo o una apariencia de tranquilidad y coherencia en lo que hacemos para lograr tener y entender del "sentido"... 


La muerte no es enemiga del "paseante", es la exacta tensión suprema del poder que yace completo en su historia, pero ni en ella se compensan los gastos y beneficios de esta vida, ni de la fortuna Magna en el saber y establecer cuadrante de lo que hace a un "mundo"; por quien comprenda de estas palabras la identidad de los que hemos llegad, desde hace siglos en varios cuerpos y en los caminos; más puede que al darse cuenta de abrir la puerta y ver lo que hay dentro y lo que hay fuera del "silencio", la vanidad y el temor se enciendan en virtudes y alegrías... 

No puedo exponerlas todas, las secretas fórmulas de entidades que cambian, por ciertas razones "equidistantes" y honestas, pero cierto es que expondremos que todo esto algo que funciona en la necesidad del comprender los mundos, y que son muy pocos, tan poquísimos los hombres y las mujeres, que entenderán lo que hay grabado entre líneas... 

De los verdaderos hombres, y mujeres de antaño, son los que salen de la cuenta y tangente expuesta al momento, y en la linterna humana se convierten, en el ojo "ciego"; todos los que observan siempre al "siendo", hacerles sin moverse en lo que han creado a millones de mundos, y en la realidad tremenda y significativa de las personas, se doblegan en sí mismas como las flores de invierno... 

¿Será la suerte?, ¿El Destino?; ¿Providencia? 

Tal como un regalo entretejido, yo les entrego una tarea para que empiecen a tirar la cuerda roja, y en el laberinto que observa, todo lo que se nutren no solo del héroe y la Doncella, sino también; de la dulce y divina actividad, de la profunda integridad en su espejismo voraz, de la Gran Bestia que se haya como un solo rayo de Rudra, siempre erguida... 

Quien sabe; tal vez muy pronto se envuelva en su poderosa claridad y valentía... 


"Naga Zero"

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