Sobre el debate de la voluntad -

La voluntad no es mero artilugio del deseo proyectado hacia un "objetivo", no es en efecto, causalidad de ser ella misma ningún medio, quien dice que sin objetivos no hay voluntad, confunde al burro con el guía del carro en la clásica historia de la zanahoria, y convierte a la zanahoria en la idea imperante de "voluntad", hace de la voluntad el burro de la historia, y es que en realidad ella no es ninguno de los elementos del conjunto proyectado, como "cosas aparte"...

Puede que nos inspire a veces, a encontrar ciertos medios para lograr ciertas cosas u objetivos en estas vidas, pero no se limita ni por si acaso a ser la mera función practica e instrumental de manifestarse como un simple medio de objetivos; puesto que aquellas cosas son solo estrategias y categorías del reconocimiento de su poder en cierto sentido, pero no son los que las infunden o permiten "de ser", desde lo que ya en si misma a engendrado en tan solo uno de sus múltiples aspectos y estados...

Falla en la proposición, quien declarando sobre la voluntad, dice que lo que la hace "ser", es convertirse en el deseo de un objetivo, y es, justamente; ese un lugar y error muy común por donde se recubren y confunden varios de ayer y hoy...

La voluntad existe desde la plenitud inmediata y tranquila de la energía potenciada y realizada, y no como una cosa desplazada en su originalidad al medio, vibra y se presenta mas allá del vehículo o la mascara en la que puede llegar a verse de ciertos, solo ciertos momentos mentales...

La voluntad se haya también, (autocontenida) en cuanto a su poderosa inmanencia y no es la prueba de lo que "por ella" se opera en ello, ya que existe sin la necesidad de ambicionar la meta dada, ni por lo que es, nada mas que una formalidad especifica de sus múltiples manifestaciones cósmicas y sociales...

Observar a la voluntad como un mero medio, entenderla como si solo estuviera supeditada al servicio de "convertirse" en un objetivo; es ya el camino seguro a la fragmentación total del fenómeno integral que emerge y "respira" en ella, y esto es debido a que ya en sí misma esta integrada como el acto completo y nunca es algo realmente desplazado, ni antes o después de cualquier fenómeno o efecto de un deseo, o en la necesidad proyectada de ese "algo" llamado como objetivo que esta desplazado de su propia inmanencia, que ya es completa y ajena en cuanto al potencial del fenómeno temporal en las manifestaciones dadas...

La voluntad real, mas bien lo es como el "vivenciar" y encarnar sin ningún tipo de ansiedades o esperas, puesto que no es para nada el objetivo la cosa que le da el sustento y la hace ser de verdad; la voluntad es tal cual, lo inmediato del poder realizado en una plenitud que no se separa en sus esquemas, y es, mas bien; como lo que "funciona" y se sostiene sin ningún pre-requisitorio u objetivo como requerimiento para establecer la realidad factible e inmediata de su propia experiencia generalizada en todo, sin la necesidad obligada de tener un objetivo para verse "conformada", ya que es; la misma tensión dinámica y fluida de la energía pura en relación con todo lo manifestante que puede "hacernos ver", que hay conciencia de sí, y esto por todas sus formas y espacios dados...

Misma es la cual permite un movimiento o un reposo cualquiera, sin la necesidad imperante de tener un objetivo para "llegar a ser"; la voluntad no requiere ningún objetivo para existir, al contrario; son los llamados objetivos los que no pueden llegar a existir si no esta ella, pero no al revés, puesto que la voluntad si existe, con, o sin ningún objetivo; es mas bien indiferente al objetivo y no es que su existencia dependa de un objetivo...

Ella opera tanto así como en la capacidad de una quietud vacía y sin ningún tipo de interés o intención dirigida, desde y de una latencia sin ningún tipo "necesario" de ser por algun objetivo, no necesariamente; la voluntad no es la mera idea del movimiento "hacia algo"...

Plantear que sin objetivos no hay voluntad, es como caer en la ilusión del confundir el film de celulosa que permite que haya una proyección desde una maquina cinematográfica, mediante el haz de luz que luego "cae" y se observa en la pantalla, y que si esta no esta, entonces no existe el film...

Declarar que si no hay objetivo no hay voluntad, es no comprender el poder real y absoluto de la experiencia inherente y completa de la voluntad en sí misma, puesto que ya es, sin la necesidad de excluirse o limitarse en los meros medios percibidos como su orgánica, cuando si es que serian los objetivos, simples estructuras por las que algunos confirman o niegan su propia existencia en la realidad "pensada", desde lo que han pretendido hacer "de" ella, la voluntad; como una idea separada de su naturaleza que ya es completa y constante en sí misma, con o sin la presencia de objetivos...