De union poderosa en lealtad y cariño sincero...

Se dice que el hombre debe elegir a la mujer que se hace su compañera de vida, pero la Ley Natural, se indica mas en la unión que atrae, mas gozo, lealtad, bendiciones, fuerza y fortuna; como la unión que deriva de una elección libre, personal y honesta, desde la voluntad honrosa y decidida de la mujer que es digna, noble, valiente e inteligente, frente al deseo y designio de elegir ella a un hombre como compañero de vida...

El hombre a su vez, si percibe clara empatía y comprende el deseo como algo lejano a intereses burdos, bajos, fuera de engaño y orgullo vanidoso; sabiendo que es por pureza de espíritu e impulso alegre y virtuoso; ha de honrarse y esforzarse, por retribuir con justicia, dulzura y firmeza aquella propuesta que ya es divina...

Luego ambos habrán de actuar con sabiduría frente a esta elección, que ya es para ambos, y el mundo entero la ofrenda mas sagrada y divina que agrada y promueve la Ley Natural; de una mujer que no siendo caprichosa y banal, ni débil, cómoda, fría, ambigua o miedosa, le exprese como una acción de voluntad firme, libre y honorable; ya que habrá entonces de darle esta unión, muy buenos momentos, fortuna y descendencia sana y honrada; también les bendice el camino con lealtad y entrega sincera y real, de una obra y hogar contento, estable, agradable, fuerte y dulce; sabio, sagrado, afortunado...

Unión real, allí en donde la belleza y fidelidad reinaran triunfando sin complicaciones, y los proyectos mas nobles podrán florecer con potencia; sin duda alguna crecerá en ambos, como ofrendas virtuosas, puras, nobles, divinas; también las bondades cálidas en aquellos, todos sus besos, caricias, y abrazos...

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