despertando del engaño...

no hay dolor como el placer, ni placer como el dolor, el cuerpo nos habita y despierta en el sentido de ser, se sufre en los espejismos de la emoción, no hay conflicto cuando se aleja lo falso, deviene en la angustia que se desborda a la conciencia de lo que es, imposible esconder la verdad para el ojo del que ha despertado a la divinidad, caminando vamos hacia lo cierto pero recordemos que así también podemos perdernos, anhelando aquellas cosas, porque nunca es seguro este mundo humano, por eso hay que ser como silencios que perduren mas allá de las mesas y los vasos, no esperar las peras del olmo, ver la realidad y atreverse a atar todos los cabos sueltos y mas que nada en este mundo, para ser feliz hay que ser capaz de evitar las mentiras que nos tientan...

y ahora se liberan de su ensueño a lo que no se compara con la potencia de un acto físico, mágico y presente, la debilidad que se encuentra en la entrega a un mundo carnal, sin vida, inexistente y vacuo cuando es control y vanidad, no somos mas que espejos del otro, hasta que algo lo quiebra y derriba el sistema que no es fuerte y valiente, no hay igualdad en el mundo de los humanos, todo comparaciones y decepcion, pero hay una forma de escapara a esa tormenta, viajar por el mundo y aceptarlo todo, mundo de ilusiones mas sin embargo ebriagante y sensible, solo en la identidad espiritual que no engaña es que uno florece a lo infinito, llega y vive a la fuente misma de estar aquí, no aprendes nada si no es por tu propia experiencia y el karma, responde tarde o temprano a tus actos, la sabiduría esta en ser distinto e igual, no convencerse facilmente de nada, abrazarse en uno y darse cuenta de lo inútil que es pretender las cosas...

ser al momento que se vive y el tiempo que se deshace en palabras, sentidos y pensamientos, nada es lo eterno en esta mascarada de piel y aguas, no avanzar es tener miedo constante, repetir la mentira es no creer en uno mismo, porque todo se aleja cuando no tiene esa raíz de poder trascendente, el amor no es un sentimiento, tampoco una razón, ver lo justo en acción, estar tranquilo y saber que todo lo que viene, va, todo lo que haces tarde o temprano recibes, no hay salida al crecer, al evolucionar o morir, la hipnosis de creer ser algo que no sabemos que es, por desespero y vicio, es solo la puerta a la superficialidad que jamas nos sacia, hambrientos vivimos rodeados de todos nuestros caprichos y aun así, no hay paz, no hay plenitud...

aquello que nos precipita al orgasmo del dolor, al aullido de la muerte, al engaño de los perdidos...

nadie puede pretender ser algo que no es, pero tu esencia perdurara aun mas luminosa y libre, si trabajas en lo supremo que hay, no sea que pronto quedaras encadenado una y otra vez a los mismos errores y consuelos de esta vida...

siempre hay otra salida...