No es talgia...

que paz mas antigua y extraña siento hoy día...

es como uno de esos días soleados que todos recordamos siempre, cuando la naturaleza y el sol nos bendecían con juegos y aventuras exorbitantes...

la inocencia del ojo que percibe, la idea de la lucha generacional basada justamente, en la perdida del ensueño o el ideal...

pero aun mejor, era la pureza existencial, el camino de tierrita y sus confines sicodelicos...

la búsqueda de una utopía que es real, se mantiene de milagro, mágicamente y en eso esta su fuerza...

¿pero entonces porque la vez como lejana, distante?

la soledad nos enseña muchísimas cosas, pero no es ella la culpable de nuestras desgracias...

la compañía nos alegra, nos excita pero no es la respuesta final, el eje de oro puro...

tal vez nunca podremos evitar la nostalgia, pero si realizarla plenamente y de esta forma, trascenderla...

entender que no son las cosas que se evitan, sino las que se hacen las que nos acercan a nuestros objetivos mas rápidamente...

lo otro seria pecar de inseguro ante la vida...

una conducta arrojada, radical, peligrosa y efectiva al mismo tiempo...

recuerdo y agradezco el sur de Chile y sus habitantes de la luz...

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