La plenitud del espanto y la forma -

Lo que se lleva en la Sangre, nunca se alejará demasiado de la realidad profunda en sus raíces, pues vive del encuentro en la intuición, y es lo que nos permite desinstalar todas las trampas del silencio incomodo y las miradas graves; de todos los jueces, traiciones que graban sus vicios en las virtudes supuestas, por las que acusan a los frutos disidentes...

Hemos vivido, hemos gozado, somos inmortales en la incandescencia, giramos por la razón del corazón en lo que no se acepta por imposición de condiciones foráneas; y es por lo que se niega de lo que le importa a las masas mecánicas del nuevo estado en las cosas, nuevamente convertidas en mercancía y peones del odio, de la ignorancia y el desencanto...

Pues que no se confundan aquí, ni abracen ustedes todo cuando abren los ojos, y sueñan con la novedad del momento; tal dicha en el progreso que luego hacen moda, y en lo que no es mas que otra ilusión de vanidad y tormentos; es por lo que sueñan la manifestación de una idea que se viste de libertad, pero termina siendo envuelta su voluntad en cadenas terribles, preciosas...

Lo es porque no es de ningún tipo, ni en el motivo de la generalidad moderna en el gobierno de las conciencias, y en lo que pretenden hacer del todo al mundo entero una sola regla, obligada y por disfraz de la democracia aliada en su traición, a todas las tierras que nutren nuestras historias de origen, y en el sabor de los huesos, y en la poderosa sangre divina...

No te apures en derrumbar la huella de tus padres, por lo iniciado en la manera que se hace a la fuerza de trascender muchos limites; lamentos y anhelos, van sacando la dominación del que te anula y endeuda, y luego te obliga a rendir las cuentas...

Eso es porque el tonto extraño piensa que ya te conoce, entonces predica cerdos para ganar las perlas de tus ojos, cuando se nutre en lo que te hace esbirro y traidor al noble camino de la gracia y la forja secreta...

No saben nada, no perciben; se levanta en la ignorancia hacia los que rompen moldes, y en lo que infecta la casualidad con la intención de hacerla una eterna duda, porque no le alcanza ni para la sospecha...
Lo hace como la verdad, cuando solo copia y pega un discurso en el veredicto acordado de antemano,  por sus propios verdugos y acreedores del placer que ya es lamento...

Quiebra el molde de la explicación, derrumba esas ruinas que se visten de conocimiento, y sube al monte en las noches, y agota el cuerpo y baila donde las nubes no se atreven a llegar porque no hay aire...

"Naga Zero"